el poema que iba a escribir,
la vida que iba a comenzar a vivir,
en fin, los proyectos.
Recuerdo hasta aquel partido de fútbol
que se tuvo que suspender por la lluvia.
Ahora miro hacia atrás
y ya tengo más de cincuenta años,
te juro que me cuesta creerlo,
medio siglo da para completar una época.
Pero aquí estoy,
no sé cuánto queda para el final
y, sin embargo, sigo con ganas de hacer cosas:
terminar el libro de poemas,
terminar de tanto comenzar a vivir
y disfrutar de la vida sin excusas,
continuar con nuestra historia de amor
(aún recuerdo el primer beso que te di
y todavía sigo deseando estar contigo a solas).
Ahora, que son las cinco de la tarde
de un día cualquiera,
siento que estoy en medio de algo
a lo que, y deja que me contradiga,
no quiero poner término;
seguiría escribiendo este poema
hasta que se acabe el día
o, mejor, seguiría empezando el día
hasta que se acabe el poema
y vengas a acostarte,
para compartir nuestros sueños.
sábado, 8 de marzo de 2025
Suscribirse a:
Entradas (Atom)
Ayer lo dejé a medias
el poema que iba a escribir, la vida que iba a comenzar a vivir, en fin, los proyectos. Recuerdo hasta aquel partido de fútbol que se tuvo q...
-
Todavía es pronto; unos tres mil años, desde que nació el pensar filosófico, es poco, si lo ponemos en relación con la edad del universo. Y,...
-
¿En qué no nos hemos parado a pensar? Si nuestro pensamiento ha sido capaz de abarcar la totalidad, quizá sea el momento de pensar la nada. ...
-
Guardo como un tesoro mi primer libro, me lo regaló mi abuelo cuando cumplí once años. Se trataba de una versión infantil de las grandes epo...